Este martes por la tarde se desarrolló el primer Encuentro de Voluntariado del CECAS del año. Se realizó en un entorno inigualable, muy bonito: la Comunidad Terapéutica de Can Puig, en Sant Cugat del Vallès. Pudieron asistir 14 voluntarios y voluntarias de las 31 que actualmente dan su tiempo libre en beneficio de la misión de la entidad, y sobre todo, en beneficio de nuestros usuarios y usuarias. Vinieron tanto personas voluntarias del centro de Acogida, como de Can Puig como de Tarragona.
De entrada, el director de Can Puig, Sergio González, y distintos usuarios, nos hicieron una visita por las instalaciones y el entorno de la Comunidad Terapéutica. Al terminar tanto Sergio como el director general del CECAS, Ferran Solé, recordaron la importancia que tiene para el CECAS el binomio profesionales – voluntariado, y como cuando no está el último, se nota su falta.
Tras la visita y los discursos de presentación del patrón Antoni Campreciós, hubo un largo tiempo para compartir la experiencia de cada persona voluntaria. Discursos emocionantes y estimulantes que animaron la jornada.
Frederic (seguimiento de suministros) recalcó de su voluntariado “la satisfacción de darse a los demás”. Gemma (apoyo a cocina) se emocionó mucho porque reconoció que le aportan más los usuarios a ella que al revés, que la hacen sentir “una más”, que comparte “muy buenos momentos” y que cuando no puede venir al CECAS a hacer el voluntariado, lo echa de menos. Toni (refuerzo escolar) indicó que los usuarios tienen más cultura de lo que parece, puesto que cuando les enseña a escribir, a leer y/o matemáticas, y sobre todo al hablar de gente famosa, lo ha podido comprobar. Oriol (acompañamientos) empezó indicando que era el más veterano (lleva más de 30 años de servicio en el CECAS) ya que «el voluntariado es otra adicción» y es «un gozo el contacto con ellos». Emi (taller de teatro) quiso recalcar el hecho de que «el voluntariado (le) hace valorar mucho las cosas», ya que está «haciendo el bien, aportando algo» y aprendes mucho de ellos. Acabó muy emocionada al decir que este voluntariado «es una de las relaciones más bonitas que he tenido en mi vida». Betty (cocina, acompañamientos) expuso que el voluntariado de acompañamientos es clave para “hacer compañía a unos usuarios que para ellos es muy duro y que con el hecho de compartir, les hace más ligera la carga que llevan”. Jaume, tesorero del CECAS y antiguo voluntario, indicó que “quiero volver a hacer voluntariado en el CECAS porque lo echo de menos, sobre todo el contacto directo”. Lali (taller de dibujo) recordó a los familiares que habían hecho un voluntariado en la entidad antes que ella y el hecho de que siendo voluntaria “recibes mucho”, “aprendes muchísimo” y tienes “una conexión con ellos” muy bonita. Tanto ella como el Ciscu (apoyo jurídico) salen muy contentos el día que termina la jornada de voluntariado. Además, Ciscu explicó la relación con una trabajadora social del CECAS para «facilitarles la vida» a las personas usuarias que tienen temas judiciales pendientes de resolver. Pedro (dinamización deportiva) lleva más de 10 años haciendo voluntariado y ha tenido la suerte de encontrarse con 3 usuarios ya rehabilitados en Barcelona que “se acuerdan de ti, con mucho cariño”. Como dice Paco (distribución de alimentos) “la vida me ha dado muchas cosas y quiero devolverle algo” a través del voluntariado. Giuseppe (actividades culturales) destacó que “la experiencia te llena mucho”. Finalmente, Adelaida (cocina) dijo, emocionada, que se sentía muy a gusto y que se había sentido muy querida.
Ferran Solé quiso recordar que todas las personas voluntarias aportaban mucho a la entidad ya las personas usuarias, y que son un ejemplo y un referente para las personas drogodependientes porque se sienten descolocados conociendo a personas que dedican su tiempo libre desinteresadamente a los otros.
Antes de merendar y poder saludar a los usuarios de Can Puig, el gestor del Conocimiento, Joan Ramon realizó una excelente exposición sobre la drogodependencia explicando cómo el CECAS fue líder hablando de rehabilitación y reinserción de las personas drogadictas, a los suyos inicios, y como en 2005, también lo fue, creando una Comunidad Terapéutica especializada para mujeres drogodependientes y de acuerdo a los buenos resultados del tratamiento diferenciado. También expuso cómo la drogodependencia afecta a los lazos sociales y al proceso de maduración de la persona drogodependiente. Y lo importante que tengan contacto con personas voluntarias y profesionales para que se activen, tengan relación con entornos saludables, y se animen a dejar de consumir drogas. Para ellos y ellas, el voluntariado es un estímulo para conectarse más con uno mismo y con la sociedad. Además, la diferencia entre el equipo de profesionales y el equipo de voluntariado radica en que los y las profesionales atacan el problema, por tanto, generan tensión en la persona drogodependiente, en cambio, el voluntariado es el espacio de relax y ocio, de descompresión, que necesitan para compensar todo el trabajo terapéutico.
Al finalizar la exposición, nos emplazamos en el segundo Encuentro de Voluntariado del CECAS del año 2023 en la Comunidad Terapéutica de Tarragona para profundizar en la atención especializada a mujeres.
Joan Gil, técnico de Apoyo a Dirección (responsable del voluntariado).